Sueño de una noche de Otoño



02 OCTUBRE 2007



Esta noche soñé. Desde bien pequeña tenía la creencia, tal vez absurda, de que los sueños son regalos que se te ofrecen cuando haces algo bien, mientras que las pesadillas son castigos por una desventurada maldad. A veces aún lo creo.


Sé que parece absurdo pero da la casualidad de que cuando me porto bien, cuando cumplo con mis propósitos, cuando siento que hecho lo que de verdad debía hacer, entonces sueño. Pero cuando te portas mal, haces daño a alguien, mientes, fracasas, no estás a la altura, entonces la pesadilla se torna en mi castigo.


Hoy soñé. Aunque no estoy segura si más que un sueño era una pesadilla. Soñé con los análisis que tengo que recoger esta misma tarde. Soñé que estaban perfectos, que no había ningún problema, ninguna señal que desvelase la realidad. Todo bien. Excepto una cosa. El médico me decía que estaba en mi peso, que tal vez no me vendrían mal dos ó tres kilos más, pero que mi peso era adecuado. Sin embargo, mi porcentaje de grasa corporal era excesivamente alto. Me decía que me sobraba grasa, que no tenía una dieta equilibrada y que debía cambiar mi alimentación. Comer más proteínas e hidratos y eliminar las grasas. Aquello me asustó sobremanera. Pensar en comer. Pensar en platos llenos de comida, pasta, arroz, carne, pescado… no, no, no. Platos rebosantes de comida delante de mí.


Era tan real… me miraba al espejo y veía cómo caía la carne flácida de mis brazos a causa de la gravedad. Mi cuerpo deforme, enormes caderas y piernas celulíticas y flácidas. Un culo demasiado grande, un estómago fofo, redondo y sin forma. Me veía deforme, excesiva, gorda, grasienta, fofa, flácida, una inmensa bola deforme.

Cada día al llegar a casa mis padres me esperaban con un plato enorme lleno de comida grasienta, podía ver la salsa, la grasa, el aceite, en cada migaja.


Ayer me dieron en ARBADA varias hojas con información sobre el modo de llevar el día a día con el TCA, además de unas pautas de comportamiento familiar para el tratamiento.


Les di a mis padres el primero de los documentos pero les oculté el segundo, las pautas de comportamiento familiar. En él dice:


[…]

- Los padres deciden los menús diarios, deben abstenerse de preguntar al paciente su opinión.

- Ignorar comportamientos o protestas del paciente respecto a cantidades, contenido o quejas.

- Variar los menús para evitar que el paciente pueda acogerse a determinados alimentos que puede llegar a ritualizar.

- No saltarse ninguna comida.

- Abstenerse de entrar en la cocina cuando se haga la comida.

- La comida y la cena constarán de primer y segundo plato y postre.

- La comida ha de ser servida por alguien de la familia, nunca por el paciente.

- El paciente ha de comer en compañía.


Tuve miedo de darles aquellas instrucciones a mis padres. Miedo de que me quitasen mi dieta. Miedo de que me vigilasen cada comida, de que no me preguntasen por el menú, de que no me dejaran servirme mi propio plato. Miedo de que no me permitieran comer a solas, de que me obligasen a comer diariamente en casa. Miedo de tener que incluir varios platos en cada comida. Tuve miedo y les oculté tal información.


Y esta soñé. Soñé que mis padres descubrían esas hojas y se las tomaban al pie de la letra, obligándome a comer cantidades inhumanas de platos sabrosos, grasientos, hipercalóricos, vigilándome en cada comida, prohibiéndome comer a solas y obligándome a volver a casa cada día a la hora de la comida.


Era real, estaba en mi sueño, pero era real. Tan real… sentí miedo, pánico. No quiero que descubran esa parte. No quiero que se entrometan. Quiero que me permitan hacerlo a mi ritmo, a mi paso, poco a poco.


No fue un sueño, fue una pesadilla y, como siempre, vuelve a cumplirse la creencia de que cuando haces algo mal, algo que no debes, como ocultar dicha información a tus padres, el castigo se cierne sobre ti en modo de pesadilla.


Y esta noche tuve una.


ANA


6 comentarios:

..."""silvanna"""... dijo...

Hola de nuevo! No es que me kiera meter en donde no me llaman...pero...si en ese centro de ayuda te dan esas pautas no deberias de hacerles caso en todo? supongo ke ellos sabran komo ayudar ya que tienen bastante experiencia. No digo ke empieces a komer demasiado, pero no se, kizá seria bueno sincerarte del todo, enseñarselo a tus padres, y a la vez decidir entre todos las cantidades... no simplemente ceñirte a lo ke te pongan ellos. De todas maneras, estoy segura de ke saldras de esto, porke le estas echando ganas, y si uno kiere algo kon tanta fuerza komo tu kieres salir de esto, lo konsigue. Te deseo lo mejor, y ke te rekuperes del todo! te mando muchos animos !!!. Un beso :)

pin up dijo...

que fuertes son las medidas que incluye esa pauta!
quizás es mejor que vayas de a poco, a tu ritmo, pero no es la idea que con todo el esfuerzo gigante que estás haciendo tratándo los transtornos simplemente te hagas la ciega de medidas que te pueden servir....
(aunque sigo diciendo que las encuentro exageradísimas!)
Espero y tengas mucha suerte con los resultados de tus análisis, y hoy tengas un sueño hermoso...
Cuidate

Anónimo dijo...

Si la chica que te atendió te dijo que le contases cuanto quisieras y te dejó ir a tu ritmo, deberías hacer lo mismo con esas pautas de alimentación. A tu ritmo! si no quieres seguir esa página estará perfecto, porque ya vas a hacer una. Tienes todo mi apoyo, creo que lo estás haciendo bien, no tengas prisa.. un beso

Artu

Anónimo dijo...

A tu ritmo, pero en algun momento deberias de hacer caso a esas pautas. Es dificil por q es un cambio brusko kizas pero, es necesario. Tu eres tu guia, eres la que te lleva, piensa bien lo q aces. Azlo por ti, es por q kieres, por q tu eres kien lleva tu guia.
Cuidate ok??

Si,
escalera,
sube
en el presente,
peldaño
tras peldaño,
firmes
los pies en la madera
del presente,
hacia arriba,
hacia arriba...

Ile

PaperDoll dijo...

uffs! ke sueño ese
y la pauta es algo estricta no

animos princesita y no exes pie atras :)

Anónimo dijo...

Aunque sean estrictas las pautas, tampoco creo que tus padres sean tan brutos de ponerte platos rebosantes de grasas, eso es una exageración. Además podrías hablarlo con ellos, que por lo menos al principio te dejen ir a tu ritmo, para no agobiarte enseguida. Creo que lo entenderán. Si te quieres curar tienes que hacer caso a lo que te digan los especialistas, inténtalo, a lo mejor no es tan difícil como tu piensas!

Venga ánimo!!!

Lorena