Me rindo


02 JULIO 2007


“Hola.”


– “Buenos días, ¿Cómo te llamas?”


– “Ana.”


– “Muy bien, Ana, dime, ¿Por qué estás aquí?”


– “He imaginado cómo sería este momento en muchas ocasiones durante los últimos meses. He imaginado que entraría aquí y usted me preguntaría por qué estaba aquí. Y me he imaginado dándole diversas respuestas tan audaces y ágiles que le dejarían asombrado. Había pensado decirle que, en realidad, esperaba que usted me dijese por qué estoy aquí. También, se me ocurrió decirle que la razón por la que estoy aquí es porque me he rendido, porque no puedo más, porque no soy capaz de hacerlo sola. Y, tal vez, le hubiese dicho que la verdadera razón por la que estoy aquí es porque no sé porqué estoy aquí, porque quiero saber por qué estoy aquí, porque busco respuestas. Y, sin embargo, ahora, estoy aquí y no sé qué debo decir. “


Me he rendido. Bueno, tal vez no me haya rendido del todo. Pero, en cierto modo, lo he hecho. No puedo más. No soy capaz de hacerlo sola. No soy capaz. Me rindo.


Durante el último mes de Junio he empeorado hasta extremos insospechados. No en cuanto al peso, la comida o la delgadez, sino mentalmente. Se me ha ido la cabeza literalmente.


He estado un mes entero de exámenes que me ha sumido en la más absoluta de las locuras. Ya antes era consciente de lo importante que se ha tornado la rutina en mi vida. Pero creía, equivocadamente, que podía controlarlo – maldito control –, que podía llegar a un equilibrio que me permitiese vivir de un modo satisfactorio, que me permitiese vivir, simplemente, vivir. ¡Cuán equivocada estaba! La rutina no es más que un engaño, un parche más en mi corazón. Pero cuando ésta desaparece te sientes débil, torpe, inválido, desorientado, perdido, angustiado, descontrolado. Terminaron las clases allá por finales del mes de mayo y con ella mi rutina. El gran parche de mi vida. Terminaron las clases, los horarios, los madrugones, el gimnasio, las listas, las tareas, los qué hacer. Y cuando todo eso se acaba siento que no tengo nada, siento un enorme vacío. Cuando el parche desaparece queda al descubierto el enorme agujero que hay en mi corazón, en mi vida.


Creía, equivocadamente, que podía controlarlo – maldito control ­–. Creía, equivocadamente, que podría encontrar un modo de enfrentarme a la vida, otro parche que hiciese las veces de rutina hasta que empezasen de nuevo las clases, los horarios, los quehaceres, la rutina.


Pero los parches ya no son suficientes para tapar el enorme agujero de mi vida. Ha llegado un momento en que el agujero es tan grande que no soy capaz de taparlo y este agujero no sutura solo, no cicatriza. Y duele.


Y me rindo.


Durante los últimos meses me he dado cuenta que durante los últimos años me he estado engañando al intentar convencerme de que lo había superado, de que había mejorado. Pero no es cierto. No sólo no he mejorado sino que, además, he empeorado. Pero me he dado cuenta, también, de que la anorexia, no es mi verdadero problema. De que la anorexia no es más que otro parche que puse en otro momento de mi vida. Otro parche que no he sabido quitar y que pesa en el bagaje de los sueños rotos. La anorexia no ha sido más que un modo falso de enfrentarme a la vida, creyendo, erróneamente, que si conseguía controlar algo, podría controlar mi vida.


Durante los últimos años me he empeñado en convencerme a mí misma de que podía superarlo sola. De que no necesitaba ayuda porque vivir no podía ser tan difícil. No debería serlo. Pero lo cierto es que no puedo hacerlo sola. Se me escapa de las manos. Siento que me hubiesen puesto la vida en las manos y no supiese qué hacer con ella.


Y durante los últimos meses se me han agotado las fuerzas. Me he quedado sin aire. He perdido las fuerzas y no soy capaz de levantarme. Se han ido cayendo los parches de mi vida uno a uno, poco a poco, y, ahora, no encuentro el modo de enfrentarme a ella.


Durante los últimos meses he empeorado hasta extremos insospechados. Mis manías han aumentado hasta el exceso, mis obsesiones, la angustia, el orden, la ansiedad, la rabia, la ira, el inconformismo, el pesimismo, la soledad, la inquietud, el miedo… me puede. Y me rindo. La irritabilidad, los cambios repentinos de ánimo, todo o nada, la insatisfacción, la falta de concentración, la sensación de vacío, la angustia, los impulsos, las voces, esas imágenes en mi cabeza… todo ha vuelto con más intensidad. La idea recurrente de suicidio.


Y, aunque hay una parte de mí que sabe que nunca lo haría, me da miedo. Porque nunca se sabe. Porque he perdido el control – maldito control­ –. Y nunca había pensado de un modo tan cercano y tangible en el suicidio. Porque la idea me carcome la cabeza continuamente y me asusta. Porque tengo miedo. Porque se me va de las manos. Porque no veo otra salida. Porque me puede. Porque no soy capaz. Porque me he dado cuenta. Porque me he estado engañando. Porque necesito ayuda. Porque, porque, porque…


Me rindo.


Esta tarde tengo cita con el médico. Me he rendido. Necesito ayuda. Y tengo miedo. Sé que no será fácil. Pero es mi última esperanza. Sola no sé hacerlo, no he sabido hacerlo. No he sabido vivir. Después de 10 años creyendo que podía hacerlo sola me he dado cuenta de que solo era un engaño. Otro engaño más en mi vida. Y he decidido hacer lo que debí haber hecho hace más de 6 años. Rendirme.


Después de varios meses de divagaciones, de disgustos, de crisis, de enfados, de sufrimiento, he dado el paso, pedir ayuda. Y cómo cuesta pedir ayuda. Una ayuda que debí haber pedido hace más de 6 años. Una ayuda que no sé si llegará demasiado tarde. Una ayuda que me da miedo.


Y he imaginado en muchas ocasiones cómo sería la primera sesión, imaginando qué decir, qué palabra exacta debía utilizar a continuación. He imaginado en muchas ocasiones qué le diría al psiquiatra. He intentado averiguar la razón, la verdadera razón, por la que estaría allí.


Porque quiero vivir.


Porque…


Me rindo.


ANA


9 comentarios:

VaLenTiNa'S DiaRy dijo...

Estoy segura que no te vas a arrepentir y qe no es tarde para volver a comenzar y dale un giro total a tu vida, y darte la oportunidad de ser feliz!!
Te deseo lo mejor

Anónimo dijo...

No creo que te este rindiendo, si no todo lo contrario has dado el paso de buscar ese problema y enfrentarte al el de frente... eso no es rendirse eso es ser valiente y querer disfrutar una vida que te corresponde.....

Porque el psiquiatra/psicologo no recogera tus pedazos y te recompondra, solo te mostrara la forma de que lo hagas tu......
Por lo que tendras que trabajar mucho en ti, y en la rutina que tienes que construir a base de ganas de vivir, que es lo que hara que no necesites parches de ningun tipo y no sientas ese vacío que provoca todo lo demás.

asi que de rendirse nada, mas bien de luchar por ti y por tu vida.
Y me alegro mucho por ti, a veces la vida se me hace insostenible y cuando a una ya de por si no le gusta vivir es muy desesperante....
Si existe solucion a mi me gustaria encontrarla.


animo y muchos besos

Anónimo dijo...

“He empeorado hasta extremos insospechados” esas han sido unas de tus palabras. A mi me ha pasado igual.

Hablas de rutina, de la importancia de ésta, ¿te confieso algo? Yo vivo enganchada a ella. Tengo que tenerlo todo perfectamente cuadriculado supongo que ello me aporta una estabilidad, y en cuanto me surge un imprevisto me tambaleo. A la vez, hay momentos en que odio esa rutina y me gustaría romper con todo y disfrutar, dejar a un lado responsabilidades, preocupaciones… e improvisar cada instante, vivir cada momento. A mi también se me han acabado los “que haceres” y también me siento vacía.

Hablas también de manías, de obsesiones, angustia, orden, ansiedad, rabia, ira, pesimismo, soledad, irritabilidad, cambios repentinos de ánimo, insatisfacción, sensación de vacío, de que todo está con mas intensidad, en el extremo, para que seguir, a mi me pasa lo mismo.

Otras de tus palabras han sido “me rindo”

Te escribo antes de ir a la psicóloga, fue curioso leer que tú también has decidido pedir ayuda, y que esta misma tarde irás. Tan solo decirte que mucho ánimo, que entiendo que has imaginado como seria ese momento mil veces y que dirías, que entiendo que busques respuestas, que entiendo que vas porque te rindes, porque no puedes hacerlo sola, y sobre todo, porque quieres vivir.

Para terminar gracias por tu email, porque me he sentido un poco menos sola, un poco mas comprendida, un poco menos triste, quizás podría decir que hasta un poco feliz, porque realmente estoy destrozada y no tenia a nadie.

Un abrazo.

Elena

elena_leni_87@hotmail.com

ANNE dijo...

WOW DEFINITIVAMENTE ME HE QUEDADO SIN PALABRAS, ES INCREIBLE DE DONDE SACAS VALENTIA Y FUERZAS PARA BUSCAR AYUDA PORQUE EN RELIDAD NO TE ESTAS RINDIENDO SINO ESTAS APRENDIENDO A ¡NO MORIR! CREO QUE EN ESTE TIEMPO QUE HE PODIDO LEERTE Y APRENDER DE TI TE HAS CONVERTIDO EN MI IDOLO EN UNA PERSONA DIGNA DE ADMIRAR.
Y LEYENDOTE ME PREGUNTO SI ALGUN DIA TENDRE ESA FUERZA PARA PODER ACEPTAR QUE EN RELIDAD NO QUIERO MORIR SINO SIMPLEMENTE VIVIR, VIVIR SIN SENTIR ESTA HORRIBLE SOLEDAD QUE TE DESGAJA POR DENTRO Y QUE TE HACE SENTIR SOLO AUN ESTANDO ACOMPAÑADO.
PERO ME ALEGRO MUCHO POR TI POR QUE A PESAR DE TODO LO QUE HAS SUFRIDO HAS TENIDO LA VALENTIA DE DECIR ¡PERDI EL CONTROL Y YA NO PUEDO SOLA! PARA MI EN TU POSISCION SERIA MUY DIFICIL DE ADMITIR ALGO ASI TALVEZ SEA INMADURES NO HACERLO PERO NO DEJA DE SER DIFICIL PODER DECIR QUE EN REALIDAD NO QUIERES MORIR.
TOMAS A EDISON DIJO UN DIA EN EL QUE YA CUMPLIA 3.000 INTENTOS DE TRATAR DE HACER EL FILAMENTO PARA LA BOMBILLA Y TODOS LE DECIAN QUE DESISTIERA QUE NO LO INTENTARA MAS QUE ESO ERA UN FRACASO EL DIJO: "NO HE FRACASADO SOLO HE APRENDIDO 3.000 FORMAS DE COMO NO HACER UNA BOMBILLA".......
Y PENSANDO EN ESO Y CON LO QUE ESCRIBIAS CREO QUE TU NO FRACASASTE Y NO TE RENDISTE SINO APRENDISTE DE 3.000 FORMAS QUE EN RELIDAD NO QUERIAS MORIR SINO SIMPLEMENTE VIVIR.
TE DESEO LA MEJOR DE LAS SUERTES Y ESPERO QUE PUEDAS SEGUIR ADELANTE Y ¡¡¡¡VIVIR!!!!

Anónimo dijo...

Como te han dicho todas las demás, no te has rendido!Estás echándole huevos a la vida. Afrontando lo que te pasa, y siendo muy valiente, porque a veces da mucho miedo pedir ayuda, y tú lo has hecho. Seguro que esto te irá muy bien, no pienses que se va a arreglar en seguida, todo lleva su tiempo, pero ten esperanzas, y paciencia, porque estoy segura de que te pondrás bien.

Y sobre todo sé más positiva, aunque por dentro no seas capaz, intenta obligarte a pensar en el futuro, en la de cosas fantásticas que te quedan por hacer, y las experiencias buenas que te quedan por vivir.

Muchos ánimos!!!

Mildren dijo...

aUN PUEDES ser feliz, nunca es tarde aun sea el ultimo segundo de la vida.

Animo puedes luchar para que tus sueños se hagan realidad.

besos

Anónimo dijo...

Es uno d los pasos mas importantes de tu vida. No es rendirte, es crecer, es volver a nacer, es quererte... es normal q despues de tantos años sufriendo aora sientas q te derrumbas y q estas completamente abajo... pero no, estas equivocada, estas yendo hacia delante y es lo mejor que podrias hacer. Eres muy valiente, y mas que nada inteligente, por tomar esa decision.. por q es tu vida la q corre peligro y eres tu la unika q puede acer algo. el paso q das es muy importante y si tu quieres, puedes comenzar a vivir de nuevo. La anorexia te a echo perder, pero puedes volver a ganar. Ganale la partida, demuestrate fuerte por q aunke parezca dificil es posible y puedes. con el mismo empeño q le pusiste al primer ayuno, haz lo q puedas para ponerle el empeño a volver a vivir e intentar ser feliz.
Te deseo lo mejor.

M dijo...

Creo que rendirte es lo más valiente que has hecho.

Y no te preguntes si no es demasiado tarde: aunque habría sido mejor rendirse antes, nunca es demasiado tarde.

Te deseo muchísimo ánimo para una etapa que creo que va a ser difícil pero que por una vez, va a tener un buen fin: que consigas recuperar la alegría, la esperanza y las ganas de vivir.

Muchísima suerte!

Nancy_Palacios dijo...

hey gracias por tu mail. De verdad que uno va por la vida conciente o inconciente de lo que hace no lo se.. me dejas sin palabras en serio que si lo único que puedo decir es el tiempo te permite ser lo que hoy eres y el mismo seguira permitiendo lo que vas a hacer del mañana pero si tu permites que el tiempo te permita tanto literalmente te hundes no dejes que el maneje tu vida a su antojo los límites existen y tu te los pones.
Tu manera de escribir y ver muchas cosas es única, de verdad que te admiro y te seguire leyendo y mucho carácter para enfrentar el dia a dia espero encontrarte en el msn...